La Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) es un espacio idóneo para la promoción y divulgación de la lectura, coincidieron representantes de los sellos editoriales que participaron en su XXII edición, la cual concluyó la noche de este domingo 3 de mayo tras 10 días de actividades, en los que cerca de 30 mil asistentes convirtieron al Complejo Deportivo Omega, su nueva sede, en la librería más grande del sur-sureste del país.
En representación de la rectora de la Universidad Veracruzana (UV) Sara Ladrón de Guevara, la secretaria académica Leticia Rodríguez Audirac clausuró oficialmente el evento, que este año registró ventas que rebasaron los dos millones de pesos.
En su mensaje recordó que para la UV el libro y la lectura son las herramientas más importantes para la educación, consideradas éstas como elementos que deben disfrutarse.
“Promover la lectura es una tarea firme de la Universidad. Los esperamos en 2016 con más libros y más lecturas acumuladas”, expresó la funcionaria universitaria, quien estuvo acompañada por la coordinadora general de la FILU, Magali Velasco Vargas; el director Editorial, Édgar García Valencia; así como por los directores general de Administración Escolar, del Área Académica de Artes, y de Bibliotecas, Héctor Coronel Brizio, Miguel Flores Covarrubias y Diana González Ortega, respectivamente.
En tanto, Magali Velasco dijo que en esta “fiesta del conocimiento y la pluralidad”, que estuvo dedicada a la naturaleza, la cultura y a Perú, participaron 13 países y más de 500 sellos editoriales representados por 74 expositores.
Respecto de las ventas generales, precisó que éstas rebasaron los dos millones 150 mil pesos al corte de las 18:00 horas del domingo, equivalentes a más de 20 mil libros comprados.
“Esta FILU marcará un nuevo parámetro, a partir del cual mediremos la del próximo año, esto marcará una nueva época.”
Sostuvo, además, que en 2016 el Complejo Deportivo Omega seguirá como sede de la FILU y que no habrá cambio de fechas, por lo cual los organizadores están analizando cómo ofrecer mejores condiciones a los asistentes.
Entre los libros más vendidos, indicó, estuvieron los del filósofo francés Gilles Lipovetsky, publicados en Anagrama, así como los del escritor Sergio Pitol, editados por Era.
“El escritor mexicano más buscado fue Paco Ignacio Taibo II; mientras que los fondos editoriales que manejan material escrito de biología, química, ingeniería y diseño se mostraron muy contentos por la buena aceptación que tuvieron”, informó.
Espacio idóneo para promover la lectura
De acuerdo con los expositores, la FILU es un espacio idóneo para la promoción y divulgación de la lectura. Samuel Mestizo Peña, de la librería Educal del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, comentó que la nueva sede les agradó, pues permite exhibir de una manera más adecuada la producción editorial. “En cuando a afluencia y ventas nos fue bien”, añadió.
José Luis Capula, encargado del punto de venta de la Universidad Autónoma Metropolitana, compartió: “Siempre venimos, año con año, y seguiremos, porque una de nuestras principales funciones como universidad es la difusión de la cultura, la ciencia y la tecnología”. Comentó que ellos como institución acuden a las ferias de mayor importancia en el país, y la FILU está dentro de esa categoría.
Enrique Ánimas, representante del punto de venta de la editorial Tusquets, comentó que sus ventas bajaron un 20 por ciento en comparación con las de la FILU 2014, pese a eso, está convencido de participar en la siguiente edición.
Tanto él como sus colegas sugirieron que a la nueva sede de la FILU se le habilite un adecuado sistema de aire acondicionado, y que se incremente su promoción para generar más interés en la sociedad.
Literatura de Perú, bienvenida en la FILU
El Director de la Editorial UV celebró que se haya mantenido el volumen de ventas registrado el año pasado, tomando en consideración que otros eventos similares del país han registrado bajas, como la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, que se celebró del 18 de febrero al 2 de marzo en la Ciudad de México.
En el stand de la UV, precisó, se vendieron más de mil ejemplares durante los 10 días de exhibición. El más buscado fue Cazar mariposas de Manuel Aguilera, Premio Latinoamericano de Primera Novela “Sergio Galindo” 2014 de la UV, el cual fue presentado el primer día de actividades de la FILU 2015.
Además, García Valencia destacó la venta de los títulos que conforman la Biblioteca del Universitario y que el más buscado de éstos fue Orgullo y Prejuicio de Jane Austen, también presentado en esta edición de la Feria. Incluso, informó, se agotó la obra Plantas y animales de las costas de Veracruz. Una guía ilustrada.
La Cámara del Libro Peruano también registró ventas favorables, confirmó la encargada del stand, Flor Ontiveros. “Estamos contentos, recibimos alrededor de 21 cajas y entregaremos menos de la mitad”.
Añadió que en los primeros días se agotaron El zorro de arriba y el zorro de abajo y Los ríos profundos, ambos de José María Arguedas; otro de los libros agotados fue Historia del Tahuantinsuyu de María Rostworowski.
Además, fue muy solicitada la obra poética de César Vallejo y también diferentes volúmenes de Alfredo Bryce Echenique.
Los talleres fueron innovadores: asistentes
Los asistentes a las presentaciones de libros y los talleres compartieron que éstos fueron muy agradables, completos e innovadores. Destacaron los talleres injfantiles “Perú con Ciencia y Arte”, en los cuales tuvieron la oportunidad de conocer la música y cultura del país sudamericano.
Así lo expresó Ángel Argüello, quien acudió acompañado de su hijo: “Me gustaron mucho, están muy completas todas las actividades, estuvieron bien atendidas y cuidadas”.
En relación a las presentaciones de libros, dijo que estuvo en la presentación de Con los ojos abiertos, de Francisco Hinojosa, a quien consideró un escritor excelente que envuelve con sus libros.
En tanto, Ana Sosa comentó que participó en muchas actividades, una que disfrutó mucho –y le pareció diferente– fue el taller de música peruana, porque los niños y adultos pudieron tocar un instrumento y formar una melodía al lado de músicos profesionales.
Homenajes y reconocimientos
Durante el último día de actividades de la FILU se llevaron a cabo los homenajes a los periodistas Julio Scherer y Vicente Leñero, así como al dramaturgo Emilio Carballido. Los primeros fueron recordados en una mesa en la que Rafael Rodríguez Castañeda, Jenaro Villamil y Miguel Elorza destacaron su pasión por el oficio y la búsqueda de la verdad como su legado a las nuevas generaciones.
De Emilio Carballido –quien el próximo 22 de mayo cumpliría 90 años–, hablaron Socorro Merlín, Francisco Beverido, Daniel Domínguez y Héctor Herrera, quienes compartieron anécdotas vinculadas con su vida, el teatro, el cine y la literatura. Como parte del mismo evento, las actrices Diana Golden, Zaide Silvia Gutiérrez y Ángeles Marín, acompañadas del actor Froylán Cuenca, realizaron una lectura dramatizada de las obras Rosa de dos aromas y Un gran ramo de rosas.
En la jornada dominical también se presentaron los números 1 y 2 del Volumen XXVIII de la revista La Ciencia y El Hombre, que este año cumple veintiocho años de vigencia como el órgano de difusión científica y tecnológica de esta casa de estudios.
Además, Alejandro Muñoz Aldape, académico e investigador de la región Poza Rica-Tuxpan, recibió la edición 2015 del premio que lleva el mismo nombre de la publicación.
La FILU se llevó a cabo del 24 de abril al 3 de mayo, con más de 250 actividades, cerca de 90 presentaciones de libros, 25 mesas redondas y conferencias, 19 actos artísticos y culturales. Además se realizaron más de 40 actividades en la sala de lectura y 40 proyecciones de cine, incluidos dos documentales.
La ceremonia de clausura fue amenizada por la Orquesta de Música Popular de la UV. Las actividades y venta de libros continuaron hasta las 21:00 horas, momento en que el Complejo Deportivo Omega cerró sus puertas.
